10 de mayo de 2011

A los 13...¿Real o exagerada?

Para que vean que no soy tan mala (ya que la crítica de Stan Helsing fue una de las más leídas), hoy voy a tratar de salvar a una película que muchos han tildado de trillada y/o moralista. 


Antes que nada, quiero recalcar que me molesta mucho que se utilice la palabra "moralista" como algo negativo. Una cosa es exigir moral cuando uno no la tiene, osea, ser hipócrita, y otra cosa es realmente creer en un valor moral. Tener moral no tiene nada de malo y decirle "no" a algo tampoco...digo, porque parece que en el nuevo siglo, si no estás de acuerdo con algo sos un anticuado o sos fascista. 


¿Y a qué viene todo esto? A que sinceramente pienso que A los trece podrá ser más ficción que realidad, después de todo, nunca estas dos cosas serán iguales, pero no me parece suficiente motivo para tacharla de muy exagerada o muy moralista.

Vayamos al argumentoTracy es una adolescente de 13 años que vive con su hermano, su madre y el novio de ésta. Pronto comienza séptimo grado y no tarda en sufrir los cambios de pasar de un ámbito infantil como la primaria al,muchas veces, poco amigable mundo de la secundaria. Las chicas se burlan de ella por su apariencia aniñada y descubre que aquellas que están cerca de las chicas populares son las que la pasan bien. Sola y con miedo de ser aislada, decide empeñarse en entablar amistad con Evie, una de estas "Miss Popularidad", quien no se encargará de llevarla por el mejor de los caminos...


Hay que tener en cuenta primero que no se trata de una súper película y que suena fantasioso que a una persona le pasen tantísimas cosas en tan poco tiempo, es verdad. Pero, si el propósito de esta película era demostrar el choque del paso de la niñez a la adolescencia y que la poca autoestima y la mala influencia son una combinación desastrosa, A los trece lo consigue perfectamente. También hay que recalcar que se hubiera necesitado mucho más tiempo para mostrar los cambios de forma realista (varios años en la vida de Tracy, por ejemplo) pero la cinta pretende mostrar solo un año; de ahí su nombre, ¿no?


Unas buenas chicas...
Quizás para una persona adulta que se considere demasiado culta para ver cine adolescente o que haya vivido en tiempos donde uno a los 12/trece años vivía y se vestía como tal edad, sí encuentre la historia demasiado irreal.
En mi caso personal, que la vi a una edad cercana a la de las protagonistas, me sirvió mucho en su momento para pensar en varias cosas. De hecho, conocí muchas Tracys e Evies, no tan definidas como en un guión, pero sí las hay, y también me tocó vivir situaciones incómodas; así que no puedo decir que no hay un trasfondo real en este drama.


Conclusión: una película simple, que no dice todo ni pretende ser una joya de la historia del cine, pero que sirve como punto disparador para reflexionar sobre muchos temas que se dan en una época tan relevante de nuestras vidas. Actuaciones modestas y una fotografía interesante. 


PUNTAJE FINAL: 9. 
  




    

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buena crítica, la película según mi opinión fue más realista de lo pensado, y aunque no lo creas, en Estados Unidos actualmente pasan esas cosas y peores. Y no sólo en Estados Unidos, ya que, yo a esa edad y por un periodo de 2 años siguientes... Fui Evie, sin exagerar.