El día que conocí a Robert Englund

Cuando me enteré que Robert Englund (Freddy para los amigos), iba a estar en la Comic Con Buenos Aires 2016, supe que tenía que estar ahí. Personalmente, lo considero como el último de los grandes actores del cine de terror, al nivel de estrellas como Bela Lugosi, Vincent Price o Lon Chaney; épocas de grandes villanos antes de que zombis anónimos o cámaras resbaladizas se convirtieran en sinónimos del miedo. Gracias a mi novio y a que me suspendieron  dieron franco en el trabajo, pude asistir y lo más importante: ¡cruzar unas palabras con el mismísimo Freddy Krueger!

Primero, debo admitir que no me fue fácil localizar a los fans del terror entre tantos cosplayers de anime y cómics de moda. Sin embargo, a medida que se avecinaba la aparición de Robert Englund sobre el escenario, el team Pesadilla se fue haciendo presente; la mayoría pasando los treinta años, muy pocos disfrazados, pero allí estábamos todos. Yo había ido con mi pulóver de franjas rojas y negras, un sombrero que me prestó mi novio y mi guante falso de cuchillas para la ocasión. 

El Robert tirando facha.

Primero vi con mi pareja el concurso de cosplay y mientras aprovechábamos que la gente se iba yendo de a poco para ir haciéndonos un lugar adelante, bien contra el escenario. Suponía que por estar en primera fila, y también por mi atuendo, habrían muchas más chances de que el animador me pasara el micrófono para charlar con Robert. Finalmente, distintos fragmentos de la franquicia se proyectaron en la pantalla y tras las palabras del animador y los vitoreos del público, el temido Frederick Charles Krueger, bajo su identidad mortal de Robert Englund (¿o era al revés?), hizo su aparición. 

A continuación, les menciono algunas de las cosas que Robert compartió con nosotros sobre su vida y Nightmare on Elm Street. Disculpen algunos datos son imprecisos, puede que mi memoria me juegue un poco en contra:

• Se interesó por la actuación por un gran propósito: conquistar chicas. En el taller de teatro de su colegio le fue bastante bien y encarnó papeles principales en obras como Aladino y Peter Pan (¿Ustedes se lo imaginan? Yo tampoco) .

• Cuando en la pantalla del televisor de su casa, comenzaron a aparecer periódicamente a la misma hora el nombre de Robert Englund entre los títulos de la serie V: Invasión extraterrestre, su padre le perdonó el no haber estudiado abogacía. 

• Obviamente, cuando él era peque, no existía Netflix, ni dvd´s, ni siquiera VHS... las películas no podían detenerse, ni adelantarse o rebobinarse. La única forma de poder verlas era yendo al cine o esperar a que las pasaran por televisión. Tras la remasterización y el lanzamiento de toda la saga de Pesadilla en DVD, Robert comenta que ahora los fans tiene la posibilidad de prestar atención a aspectos y detalles de las películas que a simple vista pasaban desapercibidas; incluso existen casos como el de Nightmare on Elm Street 2: Freddy´s revenge que es analizada en universidades. 

• Robert temía que su cabello rubio y su piel bronceada le fueran un impedimento para conseguir el papel de Freddy Krueger. Por eso, decidió engomarse el pelo para tenerlo oscuro y pintarse la línea bajo los ojos con ceniza. Durante el encuentro, mientras Wes Craven le hablaba sobre el villano de su película, Robert se concentró para no parpadear en ningún momento. Toda esta actuación inquietó tanto al pobre Wes que finalmente le quedó bien claro quién debía encarnar al villano de su película.

• Cuando se le preguntó sobre Wes Craven, Robert Englund lo definió como "todo un caballero".  

• Para convertirse en Freddy Krueger, Robert debía someterse a ocho horas de maquillaje, y como si esto no fuera poco, la primera vez que le pusieron los apliques, tuvo una reacción alérgica. Un día, durante una de estas sesiones intensas, Robert, con la vista fija en el espejo, se dio cuenta de que su timbre de voz natural no sonaba acorde con el temible monstruo que veía en el espejo; así que se puso a ensayar en solitario distintas voces. ¿Y cuándo supo cuál era la correcta? ¡Cuando logró darle al maquillador el susto de su vida!

• Robert Englund conoció a Christopher Lee, recordado por su papel de Drácula en las películas de la Hammer y luego por interpretar a Saruman en El señor de los anillos; resulta que ambos coincidieron al coincidir como jurados en un festival de cine de terror. Pasaron semanas en la casa de Lee mirando películas de horror asiáticas.

• Sus películas favoritas de la saga Pesadilla son Dream Warriors y Wes Craven´s  New Nightmare.  

Una de las escenas más recordadas de
Wes Craven´s New Nightmare

• En el guión original de New Nightmare (recordemos que en esta cinta Robert además se interpreta a sí mismo) había una escena que al final nunca fue filmada: la pesadilla del propio Robert Englund. En esta,  él se hallaba atrapado en una telaraña, y sobre su pecho, se situaba un aterrador arácnido con la cola rayada en rojo y negro, igual que el buzo de Freddy. La escena consistía en una metafóra del miedo que sentía Robert ante la idea de ser "devorado" por su icónico personaje en la vida real.

• Cuando se le pidió su opinión sobre la remake de Pesadilla del 2010, el público empezó a abuchear, a lo que Robert respondió: "Be nice" ("Sean amables"). Luego, al dar su punto de vista, dijo que la nueva versión le había gustado y destacó el trabajo de los actores. Sin embargo, para él esta nueva versión tuvo una gran falla: desde un primer momento los protagonistas son acosados por Freddy y como espectadores no tenemos mucha información de cómo era la vida de estos jóvenes anteriormente, no llegamos a conocerlos. Y yo agrego, como diría Campbell, no se interioriza en el mundo ordinario del héroe (típico: vas a la Comic Con y Robert Englund te imparte una breve clase de guión).

• Reconoció que le gustaría volver a actuar en una nueva película de la saga, pero ya no interpretando a Freddy Krueger, pues se siente algo viejo para el papel. 

• En un momento interrumpió la entrevista para elogiar el cosplay de un Freddy que andaba entre el público. Pero el momento más divertido fue cuando también descubrió que se hallaba un Jason, e impostando un tono de indignación, le dijo: "¿Vos qué hacés acá? ¡Largo! ¡Esto no es Crystal Lake!"

• No faltó la típica pregunta sobre qué le había gustado más de Argentina. Robert Englund no titubeó: el vino Malbec. 

EL MOMENTO EN QUE PUDE HABLAR CON ROBERT

Mientras aguardábamos la entrevista, me hablé con otra chica cercana a mi edad, quien me contó que había pagado el Meet and greet y me mostró el dibujo que había hecho con tanta dedicación para Robert. Dado que en realidad yo no tenía una pregunta concreta para hacerle, porque sólo tenía palabras de admiración y agradecimiento, le prometí que si me daban el micrófono, se lo pasaría a ella. Las dos acordamos que directamente le hablaríamos en inglés, ya que la labor del traductor allí presente mucho no nos convencía (en realidad no lo hacía mal, pero queríamos algo más directo o más práctico).

¡Y mi turno llegó! Si piensan que le dije algo poético, inolvidable y trascendente para toda la humanidad, están muy equivocados, pero al menos pude decirle que me encanta su personaje, que vi sus películas de chica y me traen recuerdos; pero por sobre todas las cosas, que mi escena favorita de toda la saga de Pesadilla había sido esta:

¡No hay nada más épico que escuchar el mismo "HELP YOURSELF, FUCKER!" en vivo y en directo apenas se lo comenté! 

Tal como había prometido, le pasé el micrófono a la chica a mi lado; entonces Robert Englund notó que las dos teníamos el buzo de Freddy Krueger y nos preguntó: "¿Ustedes van de shopping juntas?" Después de un breve lapso de bromear con eso, la chica le preguntó cuál había sido la película que a él le causó pesadillas, lo cual es una excelente pregunta. ¿Qué pudo haber afectado el buen dormir del actor que le causó insomnio a toda una generación? Damas y caballeros, el trailer de la película que aterrorizó a Robert Englund: 

No recuerdo exactamente todo lo que nos contó de está película de Brian De Palma, ya que mi comprensión del inglés no es tan buena como me gustaría, ¡pero sí sentí que por un momento Robert se había copado tanto relatando el miedo que esta le causó que pareció haberse olvidado del resto del público, como si estuviéramos solo nosotros tres tomando un café! De hecho, el traductor apenas pudo traducir toda la charla, ya que se hizo demasiado larga.

Las películas de Nightmare on Elm Street no sólo me encantan con todos sus aciertos, flasheos y hasta bizareradas, sino que además me traen lindos recuerdos de mi pre adolescencia, cuando ya podía tener permisos más flexibles con respecto a la tele y empezaba a descubrir el cine de terror. Y como ya dije antes, Robert Englund es uno de los últimos héroes, representante de una época muy rica para el género que me hubiera gustado vivir. No me caben dudas de que fue un hermoso momento que nunca olvidaré. 

Una última cosa, a modo de Bonus track: otro fan del público le manifestó que fue una pena que la serie de televisión Freddy´s Nightmares no tuviera nuevos episodios. Utilizando su humor característico, ese que me impide reconocer dónde termina Krueger y dónde empieza Englund, Robert respondió: "Ahora tienen a las Kardashians".